El junio del 2019 será una segunda vuelta del 21-D. El 'procés' no habrá desaparecido. Se hablará mucho de Cataluña y España. Por ejemplo en Barcelona, los soberanistas intentarán de nuevo recuperar el poder de la ciudad y hacerse con el ayuntamiento. El resto de partidos también intentarán hacer lo mismo para conseguir el poder.
Habrá una lucha municipal en la capital. Ninguna silla está asegurada y los interesados ya empiezan a moverse. Sin embargo, los “comunes”, saben que si pierden Barcelona su proyecto se hundirá. Alfred Bosch ha sido el primero en decir que quiere ser alcalde, las encuestas van a su favor y de momento no tiene rival. Los republicanos se juegan mucho. Después de lo que pasó en las últimas elecciones, el partido querrá pensárselo bien. Necesitan sí o sí, llegar los primeros. Carina Mejías ya se ve a si misma liderando un 21-D en Barcelona, aunque su partido no ha conseguido ni una alcaldía en Cataluña. Jaume Collboni busca la transversalidad con algún nombre inesperado. Por ahora, en la política insistir mucho tiene sus beneficios. Alberto Fernández Díaz lleva más de 15 años en el consistorio, y siempre dice que si las cosas funcionan ¿por qué cambiarlas?, aunque los últimos resultados ponen en duda su teoría. En este caso, el partido decidirá. En este 2018 puede empezar un 'plan renove' en el Ayuntamiento de Barcelona, tendremos que estar atentos a las primarias, unos procesos que se sabe como empiezan pero no como acaban, y ahora menos.